¿Sabes por qué estudié la especialidad de RRHH?
Desde siempre, desde que era pequeña, me han dicho muchas veces que tenía una cualidad especial: sabía escuchar a las personas. Y es cierto, sin saber muy bien por qué, sin entender la razón, me daba cuenta de que mucha gente (amigos y no tan amigos) acudía a mi a contarme sus problemas, sus confidencias, sus dudas…Me decían que conmigo podían desahogarse, que sabía escuchar, que les daba buenos consejos sin juzgar y que les aportaba confianza y seguridad.
Y así fue como, al terminar COU (sí, soy de la generación X 🤓), casi no tuve dudas en estudiar Psicología. ¿Por qué? Pues porque me encanta ayudar a las #personas. Así, en general, a todas las personas.
Y, aunque me costó decidirme por una especialidad (me encantaba la clínica y la educativa), decidí decantarme por la Psicología del Trabajo (por entonces se llamaba así RRHH) porque en aquél momento era algo nuevo, un novedoso enfoque que se empezaba a dar en las empresas, algo más allá de la mera “gestión de personal”. Y como soy una loca de las novedades, allá que me lancé ☺
La mayor parte de mi carrera profesional ha transcurrido en Departamentos Corporativos de RRHH, donde he tenido la inmensa suerte de tener jefas (si, han sido mujeres) de las que he podido aprender muchísimo, que han confiado en mí, me han dado autonomía y me han empoderado.
Gracias de corazón a Elena Cuadrado y Beatriz Sisti, mis grandes mentoras.
Pero no todo ha sido un camino de rosas. Trabajar en Recursos Humanos no es nada fácil, ¿verdad colegas de profesión?
Yo siempre he descrito mi trabajo como “nadar entre dos corrientes”: por un lado, la empresa, que es quien establece las normas y quien paga mi nómina, y por otro lado, los trabajadores, que son el motor de mi trabajo y por cuyos derechos debo velar. Y, aunque estas dos corrientes no tienen por qué ser contrapuestas,… a veces, hay situaciones en las que los intereses se encuentran “enfrentados” y es ahí donde los profesionales de Recursos Humanos debemos mediar para que ambas partes salgan conformes. Y, os aseguro que no es nada fácil. Los que trabajáis en RRHH sabéis de lo que os hablo.😅
Pero, aunque he vivido situaciones complicadas, he tenido que tomar decisiones duras y he sufrido enfrentamientos que no me hubiera gustado vivir, aún así, os confieso que soy una enamorada de mi profesión.
Y hoy, que además soy dueña de mi vida, que lidero mi marca personal Con P de Personas, y que me siento con la libertad de poder hacer las cosas “a mi manera”, cada día estoy más orgullosa y mas feliz de haber dado el paso y de poder brindar todos mis conocimientos y mi experiencia (de casi 17 años) al maravilloso y difícil mundo de los Recursos Humanos.